La Diputació de Barcelona ha posat a l’abast de la ciutadania un portal de descàrregues d’informació geogràfica. La característica principal és que la informació tindrà caràcter lliure i gratuït, sempre que es mencioni l’origen i propietat de les dades (llicència d’ús CC BY 4.0). Es tracta d’un nou recurs en línia de la IDEBarcelona des d’on es poden descarregar gratuïtament les dades geogràfiques obertes produïdes per la Diputació de Barcelona.  La geoinformació es pot descarregar en format vectorial i es contempla una doble possibilitat: La descàrrega de fitxers predefinits  o bé la descàrrega “a mida” de subconjunts d’informació geogràfica, en els àmbits territorials que determina l’usuari a través d’un mapa. 

Amb aquest nou recurs es pretén avançar en l’obertura i reutilització d’informació geoespacial vectorial, per afavorir el reaprofitament de la informació i el desenvolupament de nous productes. També es pretén ajudar en la presa de decisions dins l’àmbit territorial.

El Sr. Antonio F. Rodríguez, expert en Infraestructures d’Informació Geogràfica, ens presenta el següent article sobre aquest nou portal.
 

EL PORTAL DE DESCARGAS DE LA IDEBarcelona Y LOS DATOS ABIERTOS

Antonio F. Rodríguez
 

Recientemente se ha publicado una nueva versión, muy avanzada, de la página de descargas de datos de la Infraestructura de Datos Espaciales de Barcelona (IDEBarcelona) de la Diputació de Barcelona, basada en un concepto clave de suma importancia hoy en día: los datos geográficos abiertos. Veamos por qué es así.

Llevamos algunos años dedicados al tema de los datos abiertos y nuestras ideas han ido evolucionando a lo largo del tiempo. En un primer momento, pensábamos que datos abiertos eran datos gratuitos, luego aprendimos que la licencia, las condiciones de uso, lo que los usuarios pueden hacer con los datos es un punto clave y, finalmente, nos dimos cuenta de que la apertura de datos es bastante más, es algo muy amplio, que implica muchas cosas, muchos detalles y que se trata de que el usuario no encuentre barreras para el uso de los datos.

La mejor definición de datos abiertos que hemos encontrado es la de Barbara Ubaldi, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que sostiene que datos abiertos son datos publicados para su uso y reutilización por cualquier tipo de usuario sin barreras tecnológicas, económicas ni legales.

Nuestra experiencia es que cualquier cosa, cualquier pequeño inconveniente o dificultad puede ser percibido como una barrera por el usuario. Por lo tanto, lo que se persigue es que no haya barreras, una situación utópica, un horizonte al que tender, por cierto, como en tantas otras situaciones realmente interesantes y valiosas en la vida, como la búsqueda de la felicidad, la libertad o la democracia perfecta. Trabajar en datos abiertos es una tarea constante de mejora continua para facilitar y difundir al máximo el uso de los datos.

En ese sentido, nos congratula muy especialmente la apertura del nuevo portal de descargas de información de la IDEBarcelona. Esta Diputación hace tiempo que publica datos geográficos abiertos en condiciones muy favorables, pero esta nueva página que ha abierto recientemente supone un paso cualitativo muy importante en ese progreso continuo que supone trabajar en la apertura de datos. Ofrece un abanico de 32 conjuntos de datos muy relevantes, que retratan en detalle la realidad territorial de su ámbito geográfico de manera muy completa, una oferta que irá creciendo en número con el tiempo. Los datos se pueden descargar fácilmente, están bien documentados, se facilitan en los formatos estándar de trabajo más utilizados, en condiciones muy abiertas y bajo una licencia Creative Commons Reconocimiento (CC BY 4.0). Por todo ello, vemos que este proyecto sigue las directrices e ideas que laten en la Norma Española de Datos Geográficos Abiertos, la UNE 148004:2018.

Hay dos aspectos a destacar que nos parecen especialmente relevantes:

1)    El papel esencial que juega la información geográfica dentro de los datos abiertos. Se dice, y con razón que todo ocurre en algún lugar y esa ubicación proporciona el contexto necesario para interpretar adecuadamente los patrones espaciales de la información, de lo que está pasando. Buena parte de las iniciativas internacionales importantes de datos abiertos consideran los datos geográficos como datos clave para todo tipo de aplicaciones:

• Están presentes en siete de los trece conjuntos de datos esenciales incluidos en el Global Open Data Index de la Open Knowledge Foundation (resultados electorales, mapas nacionales, predicciones meteorológicas, emisiones contaminantes, direcciones, calidad del agua y propiedades inmuebles).
• En la Directiva Europea 2019/1024 de reutilización y datos abiertos, los datos geográficos se incluyen como la primera temática de alto valor.
• Su importancia ha hecho que haya un grupo de trabajo específico de Naciones Unidas (UN-GGIM) y una Directiva europea tan relevante como la Directiva INSPIRE.

Hay que pensar que, junto con los datos estadísticos, los datos geográficos constituyen el mejor modelo del mundo real de que disponemos para tomar decisiones, estudiar problemas, analizar fenómenos, gestionar nuestros recursos, hacer planes y, en general, conocer el mundo en profundidad.

2)    Por otro lado, es muy adecuada la elección que se ha hecho en la Diputación de Barcelona de la licencia CC BY 4.0 como licencia genérica para publicar datos geográficos abiertos. Creemos que esa licencia es la más libre, abierta y la menos restrictiva, ya que permite todo tipo de usos si se reconoce públicamente la autoría de los datos. Retiene por lo tanto la titularidad de los derechos de autor y potencia el retorno de la inversión realizada en generar los datos al promover toda clase de usos y aplicaciones. Las licencias Creative Commons son las más utilizadas, con diferencia, y al ser licencias estándar y bien conocidas hacen posible la interoperabilidad de licencias. Cuando se mezclan datos, todo el mundo sabe cómo se combinan entre sí las licencias correspondientes si son Creative Commons; incluso, si al menos una de ellas es CC, se facilitan mucho las cosas, lo que se complica mucho en otro caso.

Vivimos en un momento en el que el recurso más valioso del mundo ya no es el petróleo, sino los datos y, por lo tanto, que los datos públicos estén a disposición de todo tipo de usuarios con las máximas facilidades posibles es especialmente oportuno y tiene una muy especial relevancia, máxime cuando sabemos de la importancia de conceptos como transparencia, sostenibilidad, resiliencia y economía circular.

Por lo tanto, hay muchos motivos para que los datos geográficos públicos sean abiertos: 

• El informe PIRA (2000) fue el primero de una larga serie de estudios rigurosos que concluyen que producen un gran beneficio económico en una sociedad, con un balance coste/beneficio que puede llegar a ser de 1:44 en algunos casos
• Publicar datos abiertos mejora la calidad de la información
• Es un estímulo muy importante para la investigación y la experimentación
• Crea igualdad de oportunidades reales en el mercado
• Aumenta la cohesión social de los distintos agentes
• Y facilita la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible

En ese sentido, hay organizaciones públicas que se preguntan qué es lo que van a hacer las empresas privadas con sus datos y si se van a aprovechar de lo que cuesta generarlos. La respuesta a esa inquietud sería que todo lo que van a hacer es positivo para la sociedad: generar empleo, riqueza y beneficio, pagar impuestos, difundir los datos, darles utilidad y sentido, difundirlos, crear actividad económica, etcétera.
Por todo ello, varias iniciativas internacionales directamente relacionadas con el desarrollo económico promueven la adopción de políticas de datos abiertos como un factor claro de crecimiento y beneficio social, y subrayan la importancia de los datos geográficos. Por citar solo dos ejemplos: 

• La International Open Data Charter, apoyada por el G20 y Naciones Unidas desde el 2015
• Y la Agenda 2030 de la ONU para el desarrollo sostenible

En suma, creemos que vale aprovechar las ventajas que nos ofrece el auge de las comunicaciones y la revolución digital que estamos viviendo, ya que sufrimos sus inconvenientes. Parece que es buena idea explotar las oportunidades que nos proporciona la globalización digital que está marcando este siglo XXI, algo tan relevante que puede considerarse la tercera ilustración de la humanidad, después del siglo de Pericles (s. V a. C.) y el siglo de las luces (s. XVIII).
Creemos sinceramente que hay que calibrar la importancia y oportunidad de los datos abiertos en el contexto de la idea de sociedad abierta, definida por el filósofo francés Henri Bergson en 1932 como la sociedad que:

• Tiene gobiernos tolerantes y que responden a los deseos e inquietudes de la ciudadanía,
• tiene sistemas políticos transparentes y flexibles,
• en la que los órganos del Estado no mantienen secretos entre sí o del público,
• ni el gobierno ni la sociedad son autoritarios y 
• el conocimiento común o social pertenece a todos.

En suma, la libertad y los derechos humanos son el fundamento de la sociedad abierta. Más tarde, Karl Popper retomó ese concepto en «La sociedad abierta y sus enemigos», donde la describió como la sociedad que «pone en libertad las facultades críticas del ser humano». Parece evidente que, para ejercer el espíritu crítico, los ciudadanos necesitan tener la suficiente formación y acceder a la información. Por todo ello es tan importante que los datos de los gobiernos, generados con recursos públicos sean datos abiertos, como los datos de los que hoy estamos hablando aquí.

Por todo ello, queremos hacer llegar nuestra más cálida y sincera enhorabuena a la IDE de Barcelona y a la Diputación de Barcelona por este maravilloso proyecto.