Polen y salud

Información de interés para los ayuntamientos

Pol·len i salut_© iStock.com mandygodbehear

Los granos de polen y las esporas de hongos son células reproductoras, es decir, sirven para formar nuevos individuos. Se trata, por tanto, de células absolutamente necesarias para que se mantenga la vida vegetal sobre la tierra; sin ellas acabarían los frutos y las setas y, a la larga, las especies que las forman.

Siempre que los pólenes y las esporas realizan la función reproductora, su contenido sale hacia el exterior. Si esto ocurre en ambientes adecuados para la reproducción, el ciclo de la vida vegetal se desarrolla correctamente. Pero cuando su expansión hace que entren en contacto con las mucosas humanas —de hecho, con las de los animales en general— el contenido celular puede desencadenar reacciones alérgicas en individuos sensibilizados.

Estas reacciones alérgicas pueden manifestarse en forma de rinitis (goteo de mucosidad en la nariz), conjuntivitis (ojos llorosos) o asma (dificultades respiratorias). La aerobiología (es decir, el estudio de la diversidad y el nivel de pólenes y esporas en el aire) puede contribuir a detectar los elementos causantes de la alergia y mejorar la calidad de vida de los individuos afectados.

Los pólenes más alergénicos en Cataluña son de parietaria, gramíneas, ciprés, olivo, plátano de sombra, cenizos (Chenopodium) y llantén. Localmente también son importantes los de avellano, abedul, artemisa y algunos otros. Posiblemente hay especies todavía poco conocidas desde el punto de vista de la alergia respiratoria, como las encinas, los robles, los alcornoques y la coscoja. Es importante conocer el aspecto de la planta que causa el problema. En el apartado «Plantas alérgenas» se pueden ver imágenes de las especies principales. En cuanto a las esporas, las más problemáticas son Alternaria y Cladosporium.

El Punto de información aerobiológica posibilita a los profesionales de la jardinería municipal disponer de información actualizada de todas las ventajas e inconvenientes de las plantas en los espacios públicos urbanos y, de este modo, poder contribuir a mejorar la calidad de vida de la ciudadanía.