Plan de choque
Por un lado, la acción a corto plazo, con la aprobación del Plan de choque para la reactivación económica y social; por el otro, el Protocolo interno para garantizar durante el proceso de desconfinamiento la prestación de los servicios y de las actividades que le son propias.
Tiene como objetivo fortalecer la solvencia presupuestaria y de la organización municipal, y reforzar los gobiernos locales para el relanzamiento social y económico. Se articula en cinco líneas de apoyo a los entes locales:
• Programa «Ningún municipio atrás», para pagar a los ayuntamientos gastos corrientes extraordinarias e inversiones de ejecución rápida provocadas por la COVID-19.
• Programa de emergencias municipales, para hacer frente a los gastos extraordinarios vinculados a la vulnerabilidad social generada por la COVID-19.
• Programa específico de caminos, para mejorar los caminos municipales.
• Programa de refuerzo económico y empleo, para apoyar la economía local y el empleo.
• Programa de reactivación sociocultural, para paliar los efectos de la COVID-19 en los ámbitos social, cultural, educativo y deportivo de los municipios.
El Protocolo interno establece un conjunto de medidas para que la Diputación de Barcelona pueda continuar prestando sus servicios y haciendo sus actividades.
Esencialmente, los objetivos de este Protocolo son priorizar las modalidades de trabajo no presencial entre el personal, minimizar el riesgo de contagio entre quien desarrolle modalidades de trabajo presencial y garantizar la conciliación de la vida personal, familiar y profesional para todo aquel que trabaja en la Diputación.
Además de este paquete de medidas orientadas a la acción inmediata, la política pública de cooperación local constituye un elemento central en este Plan de mandato de la corporación, porque debe permitir articular su acción de gobierno principal a medio plazo.
